Trabajar y estudiar a la vez es muy complicado, pero a veces es totalmente imprescindible. Es el caso de aquellas personas que necesitan de un título o de unos estudios adicionales para poder optar a un ascenso o para poder cambiar de trabajo y realizar, por fin, la actividad que les gustaría llevar a cabo.

Los estudios presenciales no pueden ser flexibles porque tienen que adaptarse a toda la clase y, por tanto, tener unos horarios rígidos. Esto hace que personas que trabajen a turnos tengan prácticamente imposible el poder acudir a clase de manera regular. Se les cierra así una oportunidad para conseguir el título que necesitan para avanzar en su vida laboral.

Está también el inconveniente de tener que desplazarse porque la titulación que se desea no esté disponible en la ciudad en la que se trabaja. Esto implica tiempo, dinero y, muchas veces, unos malabarismos con los horarios que si ya son difíciles de llevar a cabo en la misma ciudad son prácticamente siempre imposibles en ciudades diferentes.

Para estos casos aparece una nueva oferta en el mercado, la de los Cursos online especializados que, estos sí con flexibilidad, facilitan el que los alumnos puedan llevar a cabo sus estudios. En primer lugar, porque las clases online se recogen en formato vídeo y el alumno puede verla cuando desee. En segundo lugar, porque el ritmo de estudio se lo marca cada persona y, en tercer lugar, porque ofrecen una gran cantidad de titulaciones a las que todos pueden acceder sin importar en dónde vivan.

Solo habrá que desplazarse para la realización de los exámenes y, por supuesto, hay que realizar las prácticas las cuales son solo durante un tiempo corto y es más fáciles compaginarlas con el trabajo ya que se realizan en empresas que suelen tener horarios amplios y turnos de mañana y de tarde. Incluso podría existir la posibilidad de realizar las prácticas en la misma empresa en la que se trabaja si desarrolla las labores propias de la titulación.

Con todas estas facilidades, conseguir un título a la vez que se trabaja es mucho más sencillo y las posibilidades de ascenso o de cambio de trabajo se amplían, logrando así que no se cierren puertas para quienes ya llevan años trabajando y en su momento no acabaron sus estudios o no alcanzaron las titulaciones suficientes para poder progresar.