Hay un viejo chiste sobre una mujer entrados los cuarenta que acude al dentista y, al verlo, cree que es un compañero de instituto pero le parece demasiado viejo para tener la misma edad que ella. Finalmente, la curiosidad le puede más y le pregunta si es quién cree y cuando él le dice que sí ella le confirma que coincidieron en el instituto. Él la mira y le pregunta “¿y de que dabas clase?”

Esta anécdota nos hace pensar que normalmente juzgamos a los demás con más dureza que a nosotros mismos y tendemos a pensar que el tiempo no pasa para nosotros. Pero si nos detenemos a mirarlos en el espejo quizás nos demos cuenta de que podría sucedernos lo mismo que a la mujer del chiste.

No todos envejecemos igual, hay gente con la que el paso del tiempo es generoso y otra con la que es más bien cruel. Pero, en cualquier caso, no hay motivo para resignarse y quedarse de brazos cruzados si la imagen que nos devuelve el espejo no es aquella que teníamos en la mente sobre nosotros mismos.

Puedes acudir a una clinica estetica Vigo y pedir una cita para ver qué técnicas de rejuvenecimiento podrían ser las más convenientes en función de tu edad y del aspecto de tu rostro. Debes de tener claro que no se trata de aparentar veinte años menos, pero sí de verse natural y más joven dentro de los parámetros que marca la edad.

Por ejemplo, las arrugas en el entrecejo pueden ser suavizadas gracias a la acción del Botox, que bien utilizado es muy útil para darle a la cara un aspecto más joven, especialmente en las arrugas del tercio superior del rostro. Para el tercio inferior, las inyecciones de ácido hialurónico consiguen eliminar casi por completo el conocido como código de barras, es decir, las arrugas que se forman sobre el labio superior y también los surcos nasolabiales.

También se pueden tratar los párpados, las ojeras y las bolsas que se forman bajo los ojos producto del cansancio y de la edad y que hacen que la mirada envejezca mucho. En definitiva, se trata de aplicar métodos suaves que rejuvenecen pero que no son tan agresivos ni definitivos como un lifting, consiguiendo resultados muy naturales aunque no permanentes, por lo que hay que considerarlos un tratamiento continuado para que tenga éxito.